
Por Redacción:
Ciudad de México, miércoles 24 de septiembre de 2025. El ISSSTE activó un plan nacional de cirugía robótica que, entre septiembre y octubre, desplegará plataformas Da Vinci Xi en cinco hospitales y renovará el equipo del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, con una meta de 150 cirugías oncológicas y urológicas antes de que termine 2025. El anuncio lo formalizó la institución y fue detallado por prensa nacional: mientras La Jornada precisa que el instituto adquirió cinco equipos para expandir el programa, ISSSTE y otros medios hablan de seis robots a instalar este bimestre (cinco nuevos más la sustitución del 20 de Noviembre). Ambas versiones coinciden en el mapa: Torreón, Saltillo, León, Hospital Regional 1º de Octubre (CDMX) y Hospital Adolfo López Mateos (CDMX); además, el 20 de Noviembre recibirá un Xi de última generación.
La lista de sedes difundida por las autoridades incluye: Centro Médico Nacional 20 de Noviembre (CDMX), Hospital Regional de Alta Especialidad de Torreón, Hospital General de Saltillo, Hospital Regional de León (Guanajuato), Hospital Regional 1º de Octubre (CDMX) y Hospital Regional “Adolfo López Mateos” (CDMX). Con ello, el programa que durante una década operó con un solo robot en el 20 de Noviembre pasa a una red de seis quirófanos robóticos (cinco de expansión y uno de reemplazo) para atender cáncer de riñón, esófago, vejiga, próstata y casos ginecológicos complejos, entre otros procedimientos de mínima invasión.
El calendario arranca esta semana: Saltillo programó el primer bloque de intervenciones a partir del jueves 25 de septiembre; el 1 de octubre se reestrenará el 20 de Noviembre ya con su nuevo Xi; y para la mitad de octubre se prevén cirugías en Torreón. Medios regionales y nacionales han ido cerrando fechas con los propios directivos hospitalarios.
En términos clínicos, el Da Vinci Xi —plataforma de visión 3D con cuatro brazos— permite incisiones menores, menos sangrado y recuperaciones más rápidas frente a cirugía abierta o laparoscopía estándar, además de precisión en campos estrechos de pelvis y retroperitoneo; por eso, programas públicos en México y fuera han concentrado su uso en urología y oncología. El 20 de Noviembre fue pionero en el ISSSTE con su primera cirugía robótica en 2015, y la actualización de hardware que ahora se comunica es coherente con esa curva de adopción.
Más allá de la tecnología, el reto operativo es duplicar la capacidad humana: formar equipos de cirujanos, anestesiólogos, enfermería y biomédicos con proctoría y simulación, y garantizar agenda suficiente para que el robot no quede subutilizado. El instituto asegura que el plan llega con carteras de pacientes ya identificadas —las 150 cirugías de 2025— y con prioridades en cáncer de alta prevalencia. El despliegue también supone logística para insumos y mantenimiento (costosos), un punto señalado por analistas como clave para sostener resultados y evitar cuellos de botella.
En la práctica, este salto significa que pacientes del Bajío, La Laguna y la Zona Metropolitana podrán acceder a cirugía robótica sin ser referidos a la capital o a privados, acortando traslados y tiempos de espera. El plan amarra, además, con una década de aprendizaje: el robot previo del 20 de Noviembre —activo desde 2015— se relevará por un Xi nuevo y, conforme a versiones difundidas por prensa, el equipo saliente se reorientará a docencia, lo que refuerza la cantera de talento.